La Asociación del Personal de Hipódromos, Agencias, Apuestas y Afines de la República Argentina (APHARA) declaró el «Estado de Alerta y Movilización» ante el desconocimiento por parte del Jockey Club de la representación de 35 trabajadores que tiene incorporados a otra convención colectiva fuera de la actividad. Se trata del personal que hace cinco meses pasó a la planta permanente del Hipódromo de San Isidro al rescindir el contrato de servicio con la empresa de transmisión de la señal de carrera que los empleaba.
Por otra parte, la APHARA que lidera Miguel Quiroga, acompañado por Diego Quiroga en la Adjunta, ante la inauguración del Hipódromo de Dolores prevista para el 10 de mayo señaló que
«siempre es bienvenida la apertura de una nueva fuente de trabajo», y resaltó la paradoja con la situación del Hipódromo de Mar del Plata por el que hace años el gremio viene luchando por su reapertura, con reclamos permanentes a las autoridades competentes «para que tomen la decisión política y realicen lo necesario» a tal fin.
En tanto, la gremial comunicó avances en las negociaciones por una recomposición salarial en los distintos ámbitos paritarios, donde la firma de un acuerdo con la Cámara Argentina de Agencias era un hecho.
Desde la APHARA indicaron que sin lugar a dudas el Jockey Club que administra el Hipódromo de San Isidro «ha cometido un acto fallido en la incorporación de estos trabajadores a una convención colectiva que nada tiene que ver con nuestra actividad, debe retrotraer su accionar y corregir el error», y advierte que «si bien está hecho el reclamo por la vía administrativa con la denuncia correspondiente ante el Ministerio de Trabajo, la empleadora lo minimiza». Por eso es que pasarán «a la vía judicial dado que no le dan la trascendencia que corresponde», e incluso llegado el caso «pararemos la actividad y entonces vamos a ver qué es lo que trasmiten si no hay carreras. Si trasmiten un paro o directamente no tienen función.
De alguna forma tienen que tomar conciencia de esta irregularidad legal, darse cuenta que la función está basada en nuestra actividad. Hasta que esta situación no se solucione mantendremos el Estado de Alerta y Movilización».
APHARA subrayó que «lo especifica muy bien nuestro Estatuto cuando habla de que todo trabajador que sostiene el desarrollo de la actividad es representación exclusiva de nuestro gremio, se trate de la tarea que sea. Y si no hay carreras no hay transmisión porque la señal la genera la actividad, la generamos nosotros mismos, los trabajadores de la actividad del turf que hacen que cada reunión hípica sea posible, así de claro».
Esta situación que se suma a reclamos que el gremio viene haciendo al Jockey Club por los trabajadores del Hipódromo de San Isidro en lo que atañe a situaciones laborales e inseguridades observadas en los lugares de trabajo, entre otros temas, puede llegar a influir a la hora de sentarse en la mesa paritaria. Todo indica que la siempre buena predisposición de APHARA a entender las dificultades que se le presentan a la patronal para resolver las demandas planteadas, se agotó. Este caso colmó la paciencia sindical y al parecer no habrá consideraciones, el gremio será estricto a la hora del reclamo salarial como a las demandas.
Ciudad de Buenos Aires, 24 de abril 2015